Nuevos matices, entretanto rompo los espacios con elegancia.
Pruebo la noche sin pretexto,buscando pausa para llega a la equidad.
Miro a mi alrededor y logro divisar un plano no experimentado. Imprevisible es el sendero, mientra mis pasos no reconocen la superficie.
Aquella voz está en mis horas pretendiendo creer que aún puedo escuchar.
Imparable e intocable,el tiempo juega sin mi.
Mientras alejo, la batalla se pinta el rostro y me invita a participar.
Presente en mi.